Pontevedra, 14 Febrero de 2015
La idea de Fomento de obligar a los transportistas
a desplazarse por la autopista de peaje es, cuando menos, discutible. El
argumento con el que que tratan de
vendernos semejante moto es acelerar la recuperación económica contando
con un transporte más rápido y más seguro que favorezca el crecimiento y la
competitividad. Sinceramente, creo que hemos llegado a un nivel de tal
desfachatez, en el que todo vale y se puede decir cualquier cosa. A Cambio
ofrecen negociar con las concesionarias para que los camioneros solo tengan que
pagar el 50% de los peajes. Además, el ministerio ansía alcanzar en el acuerdo
con las concesionarias una rebaja en la factura de la administración porque éstas
aumentarían el número de vehículos. A ver si lo entiendo bien, ¿Pretenden
fomentar el crecimiento económico del país, obligando a los transportistas a
viajar por las autopistas de peaje, echándolos de las carreteras públicas y
gratuitas que ellos contribuyeron a pagar con sus impuestos? Quieren rebajar la
factura con las concesionarias para cuadrar las cuentas a cambio de vender a
los transportistas. Les obligamos a viajar por autopistas de pago y me bajas la
factura que te debo por la construcción de las mismas. Ingenioso. Se trata, sin
duda, de la enésima puñalada al estado del bienestar que tanto costó construir.
Ya tenemos que pagar por todo. Ahora por circular por las carreteras públicas y
los primeros serán los transportistas. Después, vendrán todos los demás.
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