viernes, 28 de enero de 2022

De mí, para mí

András, 28 Enero de 2022


“Siempre tendremos Paris. Lo habíamos perdido, pero lo recuperamos anoche. Es difícil comprender que la vida de tres pequeños seres no cuenta nada en este loco mundo” - le dijo Rick Blaine a Ilsa Lund cuando se despedía de ella en Casablanca. 


¡Cuánta razón tenía el personaje de Bogart! Porque el mundo en el que estamos es tan grande, tan complicado, que la vida de cada uno de nosotros apenas vale nada entre tanta inmensidad. Somos como pequeños seres, con un entorno muy reducido, en el que únicamente importamos a un puñado de personas. 


Es verdad que el mundo no para de dar vueltas, muchas de ellas sobre sí mismo, otras alrededor del sol, pero al final, todo vuelve siempre a su sitio. Las personas hacemos algo parecido, damos vueltas alrededor de otros, pero también giramos sobre nosotros mismos para acabar siempre en el mismo lugar. 


Grandes acontecimientos ocurren cada día. Terremotos, accidentes, catástrofes naturales, guerras, eventos de todo tipo, crisis económicas, incluso pandemias. En definitiva, el mundo se desmorona y se reconstruye cada día, y esa es otra similitud con cada individuo. 


Nosotros también pasamos por un proceso de reconstrucción continuo y en nuestro pequeño y particular mundo, en nuestra propia realidad, al único lugar donde siempre podemos acudir para refugiarnos y sentirnos seguros, es a nosotros mismos. 


La pandemia ha venido a desordenarnos y, por si fuera poco, podríamos estar a las puertas de una nueva guerra en Europa, lo que no es más que una nueva vuelta de tuerca de este mundo loco en el que estamos. 


Por eso, en medio de tanta locura, de tanto problema, de tanto dirigente insensato, de tanta crisis provocada para sangrar a los de siempre, de tanto virus expandido, muy probablemente, de forma intencionada con algún interés oculto, en medio de tanto engaño masivo, de tanto poderoso interesado únicamente en defender causas propias, en medio de tanta desconfianza, de tanto odio, de tanto interés poco desinteresado. En definitiva, en medio de tanta mierda, nos tenemos a nosotros. 


Por eso hoy me he acordado de alguien a quien trato hace mucho tiempo, pero que conozco desde hace muy poco. Alguien que me ha dado la oportunidad de descubrir su verdadero yo. Porque hoy es su cumpleaños y quiero dedicarle este pequeña, pero sincera y merecida felicitación. Nos habíamos perdido, pero nos hemos recuperado y siempre nos quedará nuestro refugio donde continuar conociéndonos, lejos de los problemas del mundo. De mí, para mí, feliz cumpleaños, amigo mío.


Publicado en PontevedraViva.com el día 28 de Enero de 2022



viernes, 21 de enero de 2022

Tiempo para hacer el ridículo

András, 21 Enero de 2022


Como cada vez que tenemos elecciones a la vista, vuelven los políticos a recuperar su cara más ridícula y engañosa. Como trileros, se apoderan de la escena pública, y el espécimen público número uno, el político ibérico, vuelve por sus fueros. Es decir, a la promesa imposible, la frase hortera, la comparación ridícula y, sobre todo, a ponerse en manos de asesores tan patéticos como ellos. Digamos que se abre la veda para hacer el ridículo.


En esta ocasión, a cuenta de la absurda polémica generada con las granjas de ganado para la producción de carne. Al menos, gracias a ello, se hablará un poco de su existencia, aunque, perdamos cuidado, nadie va a resolver uno solo de los problemas de los ganaderos. Eso sí, el jefe de la oposición se abona a las comparecencias en ambientes rurales, preferentemente explotaciones ganaderas, solo porque el ministro de Consumo las ha puesto en el ojo del huracán.


¿Recuerdan aquellos tiempos en los que los políticos comparecían rodeados de jóvenes para dar la sensación de modernidad, de aperturismo y de frescura? Pues ahora lo que se lleva es comparecer arropados por un rebaño en una granja, a ser posible vacas, que transmiten más credibilidad, para que parezca que su primera preocupación son los animales y su forma de vida en las macro granjas. Es curiosa la facilidad con la que algunos temas entran y salen de la actualidad.


Es posible que comparecer rodeados de un rebaño sea la metáfora más acertada que les pueda definir, porque están acostumbrados a correveidiles que no cuestionan nada de lo que les dicen. Por eso las vacas permanecen quietas detrás de Casado, igual que lo hacen sus adláteres. Ellas por un poco de forraje, y los otros por un puesto al lado del líder o algo de poder.


El caso es que estamos a unas cuantas semanas de ir a las urnas en Castilla y León, y el debate se restringe a demostrar quién sabe más sobre los problemas del mundo rural. Y en ese sentido, en el ridículo ranking de visitar granjas, el PP va en cabeza, porque lo mismo organiza una comparecencia en una granja llena de vacas, que le arregla para Pablo Casado una actuación campestre con la cabaña local como figurantes. Atentos porque la foto de Casado dando de comer a las vacas está al caer. Lo dicho, estamos en tiempo de hacer el ridículo.


Publicado en PontevedraViva.com el día 21 de Enero de 2022



viernes, 14 de enero de 2022

La torpeza del ministro

András, 14 Enero de 2022


Que en el seno del Gobierno carguen contra uno de sus ministros, de la forma que lo han hecho contra Alberto Garzón, no es normal. Cierto es que la torpeza del ministro de Consumo es mayúscula, y que no parece muy buena idea ir a un país importador de productos que exportas, para decir que la calidad es mejorable.


¿Cómo se puede decir a un público importador que lo que producimos es de peor calidad por salir de macro granjas? De entrada, no parece una buena decisión, sobre todo, porque quienes van al supermercado no diferencian entre macro, micro o granjas medianas. Solo van a ver el país de procedencia del producto, y si el propio ministro les aporta confusión, es lógico pensar que el tiro en el pie sea inevitable.


Pero el problema no es nuevo. De hecho, no es la primera vez que Garzón comete una imprudencia de este calibre. Ya metió la pata hablando de la calidad del empleo en el sector del turismo. Cuando podría haber explicado algo sobre la precariedad, la mejora de las contrataciones, los derechos laborales... Es decir, cuando debería haber sido políticamente correcto, lo que hizo fue cometer un grave error, comprometiendo al propio Gobierno. En aquella ocasión, igual que ahora, Garzón pecó de falta de tacto, de oportunidad, de forma, en definitiva, de todo aquello que se le requiere para ser ministro-


Posiblemente se trate de un problema de su gabinete de comunicación, de una persona que esté a su lado y le indique cómo tiene que actuar o comunicar en cada momento. Sobre todo, para una persona como Garzón, que se ha visto de repente con una responsabilidad ministerial para la que, muy probablemente, no esté preparado.


Ahora bien, dejando de lado la poca capacidad del ministro, si un miembro del Gobierno comete un patinazo, lo normal es que sus compañeros le arropen, y que sea trabajo de la oposición clamar al cielo y tratar de sacar beneficio político. Pero no el resto de ministros, y ocho menos, el mismísimo presidente.


Lo normal es que el gabinete se reúna, se digan lo que se tengan que decir, se critiquen, se juzguen, pero que, posteriormente, condensen una posición y trasladen a la opinión pública un único mensaje, el del Gobierno de España. Lo que no es de recibo, es querer educar en público a un ministro, aunque se trate de uno tan torpe como Alberto Garzón.


Publicado en PontevedraViva.com el día 14 de Enero de 2022



viernes, 7 de enero de 2022

Ilusión e ilusionismo

András, 07 Enero de 2022


Ha pasado el día de Reyes, el día en el que la ilusión y la fantasía lo inundan todo. Un día especial, sobre todo para los niños, tan incrédulos, tan ingenuos... en definitiva, tan ilusionados. Pero también es un día de ilusión para los mayores porque, ¿quién en un día como este carece de un mínimo de ilusión?. 


Además, ahora más que nunca, debemos apelar a la ilusión. Vamos para dos años de pandemia. Dos años en los que nos ha cambiado todo, en los que hemos dejado atrás una forma de vida para adaptarnos a una nueva. Suele ocurrir que echamos de menos todo aquello que no tenemos, casi siempre cosas que, cuando las teníamos, no apreciábamos.


El Gobierno también está inundado de ilusión desde que a finales de 2021 le concedieron a nuestro país la primera remesa de los fondos Next Generation, creados por la Unión Europea para paliar el desastre económico que nos está causando la pandemia. Una ilusión enorme porque con la manguera de millones que llega de Europa, piensa renovar la confianza de los españoles.


Y no es para menos, porque a España le corresponden 140 mil millones de euros. Una auténtica burrada de dinero si tenemos en cuenta que a nuestro país llegan cada bienio unos 20 mil millones de la propia UE. De momento vamos a recibir la mitad, ¡no reembolsables!, y para más adelante queda el resto siempre que, como el Gobierno ha comprometido, se cumplan las condiciones que nos han exigido.


La gran pregunta es, ¿qué vamos a hacer con tanto dinero? Lo que hace falta es que llegue dónde tiene que llegar, que se establezcan métodos de reparto coherentes, rápidos, sencillos y que, finalmente, el dinero se utilice. Estamos hartos de ver cómo, por exceso de burocracia, quedan sin invertir miles de millones de euros que cada año llegan de Europa. O peor aún, cómo se destina el dinero a fines para los que no fueron creados. 


Estos fondos deben significar una verdadera oportunidad, que ejerzan de efecto palanca para modificar el modelo productivo, hacer un país más ecológico, avanzar hacia una sociedad más sostenible, reorientarnos hacia las energías renovables y, sobre todo, para que las pequeñas y medianas empresas, puedan ver incrementada su productividad.


Esperemos que no se quede todo en una operación de ilusionismo y que, por una vez, se materialicen en proyectos e inversiones que realmente cambien la vida de la ciudadanía. Un ciudadanía a veces tan incrédula, tan ingenua... en definitiva, tan ilusa. Por tanto, lo que necesitamos del Gobierno es más ilusión y menos ilusionismo.


Publicado en PontevedraViva.com el día 07 de Enero de 2022