domingo, 28 de marzo de 2021

EIRA DO MUIÑO

 András, 28 Marzo de 2021

¡Cómo están algunas cabezas!


¿Cómo se puede decir que el confinamiento por la pandemia es un arresto a los españoles? ¿Y cómo se puede afirmar, sin ningún tipo de filtro mental, que la eutanasia es la legalización del asesinato? ¿Qué cabeza hay que tener para decir una simpleza de este tipo y creérsela? Y lo peor, ¿cómo se puede votar a un partido que defiende este tipo de tonterías? Al menos esta gente juegan con una ventaja, porque tras estos pensamientos, con una confesión y un par de misas están salvados. El problema lo tenemos los demás…


Hay más de una pandemia 


Estamos tan inmiscuidnos y tenemos tanto miedo a la pandemia sanitaria, que no vemos la otra que nos asola desde hace años. Se trata de la pandemia de los políticos, tan dañina como el mismísimo coronavirus, y que causa destrucción, miseria y, sobre todo, inocula desesperanza en mucha gente que confiaba en ellos para mejorar sus condiciones de vida. No se salva nadie de esta pandemia, todos la tenemos encima, porque el contagio es inmediato, no es necesario tener contacto.


Datos que asustan


En el Reino Unido han vacunado a más de dos millones de personas en tan solo dos días. El dato, en sí mismo, ya asusta. Pero la cosa no queda ahí porque, hasta la fecha, la mitad de la población está ya vacunada. Y eso que tenían un presidente negacionista con el asunto de la pandemia. Frente a esto, los nuestros pueden presentar un par de mociones de censura fracasadas, otra municipal apoyada por los mismos que hicieron fracasar las anteriores y unas elecciones autonómicas innecesarias. Una cosa no se puede negar, y es que estos datos también asustan. A ver si nuestros dirigentes copian lo bueno de los que gobiernan para la ciudadanía y se dejan de hacer el tonto pensando únicamente en sus asuntos partidistas que no interesan a nadie.


Gran aportación


Las dos grandes aportaciones de la CUP al Gobierno de Cataluña serán la realización de un nuevo referéndum ilegal, y que la policía autonómica deje de utilizar bolas de goma en sus actuaciones antidisturbios. ¿Cómo reprenderían ellos una manifestación violenta? Supongo que dejando que los violentos lo destrocen todo, rompan el mobiliario urbano, escaparates, destruyan la economía de los pequeños comerciantes, agredan a la policía y que roben en los comercios de las multinacionales que venden productos caros.

viernes, 26 de marzo de 2021

A vueltas con la calidad democrática

 András, 26 Marzo de 2021

Por desgracia, las cosas no son de una forma porque las llamemos de esa manera, sino como realmente son. Posiblemente, nunca se ha cuestionado tanto la calidad de nuestra democracia desde que gozamos de ella, pero el problema no es la democracia, el problema es el sistema de partidos que tenemos y la calidad de los políticos actuales, que no dan la talla.

En España tenemos una democracia plena porque así lo establece la Constitución, pero lo que no tenemos es una representación política democrática y, por tanto, al no haber una representación de la ciudadanía plena de democracia, nuestra democracia se ve, en ese aspecto (no menor) lisiada sobremanera.

Los políticos han de responder ante aquellos que les han votado, ante quiénes les han dado un mandato mediante las urnas y eso, aquí brilla por su ausencia. Las comparaciones siempre son odiosas, pero es precisamente ese aspecto el que, en las democracias anglosajonas, funciona perfectamente, y por eso son más democráticas que la nuestra. Porque sus representantes políticos representan directamente a quiénes les han votado, y responden ante ellos.

En España, lo que tenemos es una oligarquía de partidos, donde el partido secuestra el voto del ciudadano, y hace con él lo que le da la gana. Incluso todo lo contrario de lo que prometió para su obtención. Los partidos políticos son instrumentos que usurpan la voluntad de los votantes, imponen disciplinas partidistas que, en sí mismas, son la negación absoluta de la democracia, porque convierte a los propios militantes en borregos y correveidiles, que acaban haciendo lo que el partido les indica aunque ello vaya e contra de los intereses de sus propios votantes y, muchas veces, los suyos propios por pertenecer a la misma región de ellos.

Sin duda, esto es una aberración que sería inconcebible en un país que, con todos sus defectos, nos lleva cientos de años de avance en democracia como Estados Unidos. Allí, los partidos han de convencer a sus propios miembros además de hacerlo previamente con los votantes.

De ahí surgen estos casos de tránsfugas, que saltan de un partido al otro cuando les conviene, dejando de lado a quiénes les han votado, teóricamente, por un programa electoral o una ideología determinada. Cuando ven que su puesto peligra porque el partido en el que están está teniendo problemas, saltan al barco de al lado sin importarles lo más mínimo a quienes deben el puesto. Son inútiles que no han demostrado nada en ningún aspecto de la vida profesional, y que están chupando del partido desde que se inscribieron en las juventudes del partido.

Pero esto no es lo peor, lo peor es que quienes les han votado, aplauden estas decisiones si convienen a su partido y dañan al adversario que, además, suele considerarse enemigo. 

Publicado en PontevedraViva.com el día 26 de Marzo de 2021


martes, 23 de marzo de 2021

Se confirma, seguiremos con la misma matraca en Cataluña

 András, 23 Marzo de 2021

Se ha confirmado que en el ánimo de ERC nunca estuvo hacer una coalición de gobierno con el PSOE en Cataluña. Y se confirma, por tanto, que su único interés era el de conformar una mayoría independentista con todos los que estén dispuestos a pasar por ese aro. Es decir, con JcCAT, la CUP y si es necesario con los catalanes de Podemos, que para el caso son lo mismo que los otros. Solo les interesa el tripartito "indepe", el mismo que lleva arrasando (literalmente) la comunidad autónoma desde el año 2015. 


Acaba de ser constituido un nuevo Parlament y ahora, los secesionistas, aún suman más que antes, por tanto, se prevé que el rodillo independentista sea aún mucho más letal. De entrada, como primera medida, han escogido a una investigada por la justicia como presidenta. Porque ya se sabe que, para los independentistas catalanes, estar imputado es un mérito. 


La elección de la señora Borrás no es aleatoria, y obedece a un estrategia muy bien definida, y es que cuando acabe siendo juzgada, condenada y, posiblemente inhabilitada, podrán venderlo como una nueva afrenta de la justicia española contra la vida política de los catalanes. Y de ahí, vuelva al principio. Es decir, a la misma matraca de siempre.

domingo, 21 de marzo de 2021

EIRA DO MUIÑO

 András, 21 Marzo de 2021

No cuadra 


En esta crisis sanitaria, que ha provocado de rebote otra económica tremenda, hemos visto cómo la intervención de los estados en la economía ha sido crucial, tanto para inyectar dinero, como para salvar puestos de trabajo. Pero, ¿cómo se cuadra una mayor intervención del Estado en la vida pública, con la reducción de la carga fiscal sobre los ciudadanos que propone la derecha?


Celebración 


España celebró el aniversario del golpe fallido con una parte de su Gobierno sosteniendo que la democracia no es plena, que hay presos políticos en el país, que hay represaliados, que hay exiliados y que la policía es una fuerza opresora que carga contra la libertad de reunión. No parece que estemos en las mejores circunstancias para celebrar nada. ¡Qué no harían estos que hacen un análisis tan superficial y parcial de la situación de la democracia española!


Contradicción


Los políticos ejercen el mando sobre las Fuerzas de Seguridad del Estado. Pero luego son ellos los mismos que critican sus actuaciones de cara a la galería electoral. Tener una doble moral y baja lealtad democrática ya lo estamos asumiendo. Pero jugar así de una forma tan banal con las instituciones del Estado es condenable. 


Lo hizo sin querer


Pablo Iglesias comunicó su intención de dejar el Gobierno para ser candidato a las autonómicas de Madrid, y ha conseguido salir en todos los medios sin necesidad de decir ninguna tontería o ser desleal con el Gobierno al que todavía pertenece. Felicidades, por algo se empieza.


Duelo de extremos


En las elecciones de Madrid compiten la derecha extrema, representada por Ayuso, y la izquierda extrema representada por Iglesias. Duelo de extremos, sin duda el peor de los escenarios que se podían imaginar. La única luz que nos queda es que van a dejar un amplio espacio para el centro moderado, de izquierdas o de derechas. Y el único que puede encajar en ese escenario es Ángel Gabilondo. Ahora solo falta que los madrileños también lo vean.



A vueltas con la vacuna


De nuevo, los políticos a lo suyo. En este caso por la administración de la vacuna de AstraZeneca. Las dudas que genera y la discusión entre la propia comunidad científica han provocado su cancelación temporal. Hasta aquí todo correcto. Lo que no es de recibo es utilizar esto para la pelea política. ¿Qué harían los que no gobiernan donde los que lo hacen han aplicado esta vacuna a la población? Eso nunca lo sabremos porque si estuvieran harían lo mismo pero no lo dirían. Ellos, como siempre, a lo suyo.


No encuentra acomodo


Poco le duró la moderación a Pablo Casado. No encuentra acomodo estratégico. ¡Ojo! No quiere decir que no tenga claro su ideario ideológico, lo que le pasa es que la prisa por acaparar poder le hace dar enormes bandazos. Apenas han pasado unos meses de la moción de censura a Pedro Sánchez, en la que dedicó un gran discurso para desmarcarse de la extrema derecha, y ya está abriéndole las puertas a unos cuantos miembros de Vox para que entren en el gobierno de Murcia. Compra de diputados, apertura de puertas a la extrema derecha, ¿qué será lo siguiente? 


Más de lo mismo 


Edmundo Bal (Ciudadanos) criticó que Illa siguiese en el puesto de ministro cuando ya había decidido ser el candidato socialista a las elecciones en Cataluña. Lo criticó, y con razón. Pero ahora le ha tocado a él, porque se va a presentar como candidato a Madrid pero cuando le preguntan si va a dejar el escaño de diputado nacional, sale por peteneras. En fin, todos iguales. Y lo peor, ¿queda en quién confiar? ¿Hay algún político que utilice la lógica cuando accede a un cargo público?


viernes, 19 de marzo de 2021

Terremoto político

 András, 19 Marzo de 2021

España es un país acostumbrado a los terremotos, sobre todo en la zona sur, donde la actividad sísmica es bastante frecuente. Hace unos días, se produjo el último seísmo, con epicentro en Murcia, pero que tuvo en Madrid sus mayores repercusiones. Tanto, que ha supuesto un impacto en todo el territorio nacional. 

 

En esta ocasión, el terremoto fue político y posiblemente más devastador para los intereses de la ciudadanía que cualquier movimiento telúrico de la corteza de la tierra que hayamos sufrido hasta la fecha. Consistió en un amago de moción de censura en Murcia, que provocó un adelanto de elecciones en Madrid, y acabó situando el combate por la presidencia de esta comunidad en el centro del interés político nacional.  

 

El PP se desmarcó convocando elecciones en Madrid porque en Murcia le plantearon una moción de censura, el PSOE se quedó fuera de juego porque pensaba conseguir el poder en Murcia, pero los que se lo iban a dar decidieron, en el último momento, ejercer el noble arte del transfuguismo. Y la guinda la puso el vicepresidente del Gobierno de España, con un último golpe de efecto, anunciando que abandonará el consejo de ministros para competir con Ayuso en las elecciones autonómicas de Madrid. ¿Quién da más?  

 

Y todo este lío que se traen, ¿en qué beneficia a la ciudadanía? ¿Saldrán de todos estos cambios algunas medidas nuevas para frenar el incremento del paro? ¿O traerán consigo, quizás, la agilidad necesaria para que las empresas cobren por los ERTES?. 

 

Me temo que no, porque hace tiempo que la política ha dejado de ser un instrumento al servicio de la ciudadanía para convertirse en un problema. Un problema muy caro. Ellos siguen a lo suyo, en su mundo paralelo, donde todo es ficción, donde no hay problemas para llegar a fin de mes, donde no se habla de nada que tenga que ver con el interés general, sino de sus únicos y superfluos intereses.  

 

Votaremos las veces que sea necesario hasta que salga el resultado que les convenga, porque todo responde a intereses partidistas, a conseguir el mayor número de diputados autonómicos para obtener una mayor cuota de poder y, también porqué no, para que el partido aumente sus ingresos.  

 

Si en Madrid hay un gobierno estable, que nos vendieron como la gran solución, ¿qué importa lo que ocurra en Murcia? Más bien, ¿qué les importa eso a los madrileños? Y el vicepresidente del gobierno de España, que lleva apenas un año en el cargo, y que condicionó su presencia en el gobierno para que éste se pudiera constituir, ¿qué hace ahora cambiando de caballo a mitad de carrera?. 

 

Conociendo a Iglesias, sabemos que detrás de esta decisión no se esconde ningún motivo de tipo altruista, y mucho menos lo hace por el interés de España. Pero él no es diferente a López Miras, Ayuso, o los tres tránsfugas de Ciudadanos que han provocado el terremoto. 


Publicado en PontevedraViva.com el día 19 de Marzo de 2021



domingo, 14 de marzo de 2021

EIRA DO MUIÑO

 András, 14 Marzo de 2021

Podemos se mueve mejor en el fango 


Las revueltas callejeras en favor de Pablo Hasél, han provocado el enésimo choque el seno del Gobierno. Piedras y botellas contra la policía, a granel, sin discriminación. Incluso saqueos de tiendas (todas caras). Las actuaciones policiales contra los violentos las aplauden los delegados del gobierno de las comunidades autónomas donde se producen los enfrentamientos, lo aplauden también los sindicatos policiales, pero lo reprueba uno de los partidos que conforman el Gobierno. Concretamente Podemos, que no condena a quienes  siembran el pánico en las calles, sino a los responsables policiales que ordenan las cargas policiales para proteger lo público. En Podemos se han aficionado a mezclarlo todo, y a que bajo el estribillo ese de la deficiente calidad democrática de España, cabe todo. Y son ellos los que menos hacen por la calidad democrática, precisamente por mezclarlo todo con el único interés de enfangar.


¿Acuerdo?


Ahora que ya han pasado las elecciones catalanas, es probable que PSOE y PP rematen su negociación para la renovación del CGPJ. Atentos, porque si el acuerdo finalmente se consuma, cada parte va a tratar de convencernos de que ha sido la otra la que ha dado su brazo a torcer.


Contradicción 


En esta crisis sanitaria, que ha provocado de rebote otra económica tremenda, hemos visto cómo la intervención de los estados en la economía ha sido crucial, tanto para inyectar dinero en la propia economía como para salvar puestos de trabajo. Pero, ¿cómo se cuadra una mayor intervención del Estado en la vida pública con la reducción de la carga fiscal sobre los ciudadanos que propone la derecha?


Celebración 


España celebró el aniversario del golpe fallido, con una parte de su Gobierno sosteniendo que la democracia no es plena, que hay presos políticos en el país, que hay represaliados, que hay exiliados y que la policía es una fuerza opresora que carga contra la libertad de reunión. No parece que estemos en las mejores circunstancias para celebrar nada. ¡Qué no harían estos que hacen un análisis tan superficial y parcial de la situación de la democracia española!



Lo enfangan todo


Los políticos mandan sobre las Fuerzas de Seguridad del Estado. Y luego son los mismos que critican sus actuaciones de cara a la galería electoral. Tener una doble moral y baja lealtad democrática ya lo hemos asumido, por desgracia. Pero jugar así de una forma tan banal con las instituciones del Estado es patético y esperemos que no nos traiga consecuencias más graves en el futuro. 


Con uno es suficiente 


Ahora que están con tanta actividad en Marte, para saber si hubo o hay vida en el planeta rojo, que se aseguren que no hay otro Pablo Iglesias allí. Ya tenemos uno aquí, y más bien parece de allí.


viernes, 12 de marzo de 2021

PSOE y Podemos juegan con fuego

 András, 12 de Marzo de 2021

Las discrepancias políticas son necesarias, y enriquecen el debate y la vida democrática. Y en ese contexto han de entenderse, por tanto, las diferencias entre los socios de Gobierno. Nadie debería discutir que exista debate en un gobierno de coalición, sobre todo porque en España carecemos de tradición en este aspecto.

Lo que resulta más difícil de soportar es la deslealtad y la hostilidad en un Ejecutivo que, a su falta de cohesión interna, suma la inclinación de algunos de sus miembros por agitar luchas de poder en relación inversamente proporcional al grado de dedicación para resolver los problemas que dependen de sus áreas de responsabilidad. Me refiero a los ministros de Unidas Podemos que, cuánto más beligerantes, menos hacen en sus ministerios.

¿Hasta cuándo resultará rentable para el PSOE contar con un socio así? No es fácil anticipar la respuesta porque, aunque el coste de mantener el gobierno de coalición superase ya las ventajas de romperlo, también las rupturas tienen su tiempo y su coste.

PSOE y Podemos ya no esconden sus diferencias públicamente. Es más, nos han acostumbrado a ellas y lo aceptan como algo normal. ¿Cuál es el motivo de tal enfrentamiento? ¿Con lo que costó construir una mayoría de izquierdas para poder gobernar, y ahora la quieren tirar por la borda por sus egos partidistas?

En un país sumido en una enorme crisis económica de la que no sabemos cómo saldremos, con una dura crisis social y sanitaria, a lo que habrá que unir tremendas consecuencias psicológicas por el agotamiento mental derivado de la falta de perspectivas y la angustia de temer por su vida; ante esta situación, los partidos del Gobierno coquetean con la idea de que no hay alternativa y por eso creen que se pueden permitir determinados ejercicios de frivolidad política.

Sin elecciones a la vista, la fractura de la derecha podría ser un motivo perfectamente válido que explicase esta actitud, porque es indudable que la derecha está hecha unos zorros. La agonía del centro derecha clásico, representado por el PP, y el flirteo con la insignificancia de Ciudadanos, contrastan con el ascenso de la ultraderecha.

En este sentido, PP y PSOE están cometiendo el mismo error. El primero banalizando el auge de la ultraderecha, y el segundo haciendo lo propio con la división de la derecha. Sin embargo, las discrepancias tan abruptas del gobierno de coalición, pueden provocar tal desgaste, que lo que puede parecer imposible, que se articule en España una alternativa de derechas, acabe sucediendo. Siempre es peligroso no tomarle bien la medida al adversario, pero peor es jugar con fuego por ningunear sus posibilidades.

Publicado en PontevedraViva.com el día 12 de Marzo de 2021




martes, 9 de marzo de 2021

El enemigo en casa

András, 09 Marzo de 2021

Ni un día sin sobresaltos para el Rey. Esa debe de ser la filosofía de vida con la que se mueve Felipe VI. Como si la Jefatura del Estado no fuera suficiente tarea, y no le generase bastantes problemas. Como se ve que no tiene suficiente con trata de mantener vivo el espíritu de la Monarquía, le ha salido un nuevo enemigo. Sin duda, el peor que tiene, y en su propia casa, en su familia, a la que pertenece y de la que no tiene forma de desvincularse. 


La verdad que el pobre Felipe no gana para disgustos, y a este pasos se va a quedar sin un familiar al que dirigirse. A la situación del Emérito, que vive en permanente situación de regularización fiscal, se une ahora lo de sus dos hermanas, que estuvieron en Abu Dabi visitando a su padre, y aprovecharon el viaje para vacunarse contra el coronavirus. Como aquí no les tocaba porque, que sepamos, ni viven en una residencia de mayores, ni superan los 80 años, ni pertenecen al cuerpo de sanitarios, pues se acercaron a los Emiratos Árabes y se vacunaron. 


Un nuevo traspiés en la poco apacible vida del monarca, al que se lo están poniendo muy difícil en su intento de asemejar la Corona con la ejemplaridad y el compromiso público.


viernes, 5 de marzo de 2021

Se les ha ido de las manos

 András, 05 Marzo de 2021

Ha pasado un año desde que empezamos a tener problemas con el coronavirus. Y han pasado más de seis meses desde que Pedro Sánchez lanzase aquel mensaje triunfalista acerca de la victoria sobre el virus. “Hemos vencido al virus”, es la frase que perseguirá al presidente cuando deje de serlo.

El caso es que hoy estamos mucho peor que hace un año. Los contagios se multiplican diariamente por miles, los fallecidos no cesan, los hospitales están saturados y los sanitarios al borde del colapso. Además, debemos añadir la constante incertidumbre por la mala planificación en la vacunación, y la escasa decisión de las administraciones a la hora de tomar decisiones. Todos se afanan en justificar su gestión, en planificar desescaladas y en seguir mirando de reojo algo que salvar. Antes fue la Navidad, y ahora es la Semana Santa.

Técnicamente son las Comunidades Autónomas las que tienen las competencias de Sanidad, pero no es menos cierto que ante la gravedad de la situación, es el Gobierno de la nación quién debe tomar cartas en el asunto y poner orden. ¿Por qué no lo hace?

Los más puristas (y los bien pensados) dirán que será la historia la que nos dé la respuesta a su inacción. Los más básicos (y temperamentales), pensamos que no hacen nada porque prefieren cargarle la responsabilidad al adversario. Han convertido un asunto de estado, un asunto de alto riesgo para la salud pública, en un tema más para la controversia política y eso, es algo por lo que todos deberían responder en algún momento.

El presidente vendió la victoria antes de tiempo. Lo que parecía desconocer Sánchez, era que España iba a entrar en el ojo del huracán, y que aquel momento era solo un respiro de apenas unas semanas antes de que la situación se descontrolase, y tres meses después, derivase en una segunda ola de la pandemia a nivel nacional. Y, otros tres meses más tarde, en una tercera ola, si cabe, más mortífera que la primera y que la segunda. Pero la cosa no acaba ahí, porque mientras discuten sobre la Semana Santa, la cuarta ola se nos vendrá encima.

Reconozcamos que esto se les ha ido de las manos. Que no tenemos gente preparada para tomar decisiones. Que todos miran de reojo el CIS cada vez que tienen que hacer algo. Que el Gobierno está ausente. Que las Comunidades Autónomas no dan el nivel para gestionar semejante crisis. Que la vacunación es un desastre de planificación...

En este asunto, deberían tomar el mando un equipo de profesionales sanitarios con conocimientos y experiencia, y no hacer nada que no tenga que ver con la salud pública y con salvar vidas, porque cuando los políticos entran en juego, todo se ensucia. Lo que pasa, que esta vez, la suciedad son vidas humanas.

Publicado en PontevedraViva.com el día 05 de Marzo de 2021