Arteixo, 28 Mayo de 2019
Tarde, pero al final dio la cara Pablo Iglesias. Y todo para volver a hacer un ejercicio al que ya se está acostumbrando últimamente, pedir disculpas por los resultados electorales. Sin embargo, lo que no se le ocurre a Iglesias es analizar a fondo los verdaderos motivos por los que Podemos ha llegado a esta situación. Al menos no lo dice en público. No se le ocurre pensar que el programa de Podemos ya no enamora. No se le ocurra pensar en la gestión deficiente en aquellos lugares en los que han tenido tal responsabilidad. No se le ocurre pensar que él mismo es un líder agotado y que ha defraudado a mucha gente. Habla Pablo Iglesias solo de los problemas orgánicos del partido, de las peleas internas y eso, siendo importante, no es el único ni el principal motivo de la menguante y continua caída de su proyecto político. Como no se le ocurra algo más ingenioso, en las próximas elecciones tendrá que salir a la palestra para firmar el acta de defunción de Podemos.
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