Tapedello, 16 Junio de 2019
Una estafa legal
¿De qué vale votar a un candidato a la alcaldía de tu ciudad si luego deciden desde los despachos de Madrid quien va a ser el que gobierne? ¿Si van a imponer al que ha perdido las elecciones solo porque les conviene para otro pacto en una comunidad autónoma lejana y que nada tiene que ver con nuestros intereses? Gobierna el que más suma, no el que obtiene más votos. Esto es, legal y legítimo aunque no nos guste a pesar de que, muchas veces, no refleja la voluntad popular. Pero siendo la cosa legal, no deja de ser una estafa sorprendente. Una estafa legal.
Urge la modificación de la ley electoral para que los gobiernos los decidan los votos y no los políticos. Ellos no piensan en lo mejor para la ciudadanía, ni siquiera piensan en lo que la ciudadanía quiere. Solo piensan en ellos. El mejor ejemplo está en las Diputaciones.
¿Se acabará con el mantra?
Al menos una buena noticia que se ha desprendido de las últimas elecciones municipales y autonómicas es que por fin la derecha parece haber entendido bien que no siempre gobierna la lista más votada. Hemos escuchado a Casado y a Rivera repetir hasta la saciedad aquello de “que gobierne la lista más votada”. Sin embargo, parece que han aprendido rápidamente lo que es la democracia española, gobierna quien tiene más apoyos, no más votos. Y han empezado a aplicarlo en diferentes municipios y comunidades autónomas.
Esperemos que a partir de ahora no volvamos a escuchar el famoso mantra. Para acabar con todo eso, lo más justo sería la celebración de una segunda vuelta para evitar que las minorías condicionen a las mayorías.
Proyecto agotado
Ciudadanos, definitivamente se ha tirado al monte. Es un proyecto que no tiene futuro y que basa en la incongruencia toda su estrategia política. Ha renunciado a la bandera de la regeneración y a ser los que lideren el cambio político en España. Por mucho que nos pese, el cambio y la regeneración parece que van a ser cosa de PP y PSOE de nuevo.
Tras las elecciones, lo que parece claro es que se trata del año uno de la reunificación de la derecha. Puede que con Vox tengan algo más de trabajo, pero lo de Ciudadanos parece pan comido, porque acabarán formando parte del PP en poco tiempo.
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