Pontevedra, 10 Junio de 2015
Louzán sabia que esto podía pasar. Fue el único del
partido que adivinó lo que iba a ocurrir en las elecciones municipales, por eso
hace ya algún tiempo que buscó un puesto de trabajo alternativo desde donde
seguir cobrando dinero público, y accedió a la presidencia de la Federación
Gallega de Fútbol. Ya tenía algo a que agarrarse, pero, por si acaso, también
se anotó en la lista del PP en Ribadumia, y lo hizo como número dos, sabedor de
las dificultades por las que atravesaba el partido. Y ocurrió lo que tenía que
ocurrir. El PP fue el partido más votado pero la pérdida de poder es incuestionable.
Tanto que ha perdido dos diputaciones provinciales, entre ellas la de
Pontevedra. Pero Louzán, aunque intuitivo, también es un hombre de partido, y ahora
hay quien le acusa de estar destruyendo documentación con la intención de no
facilitar las cosas a los que vengan. Todo son sospechas y no hay pruebas, pero
con Louzán en un lado, y posiblemente Carmela Silva, en el otro, todo es
posible. ¿Podría el presidente provincial estar destruyendo posibles pruebas
por si los que vengan quieren tirar de la manta? Si su intención va por ahí,
que pierda cuidado, porque no creo que el PSOE venga con ganas de limpiar nada.
Solo ansían el poder. Así de claro lo dejó Besteiro durante la campaña, pidiendo
el voto para echar al PP de la Diputación, antes que para el candidato
socialista a la alcaldía de Pontevedra.
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