András, 15 Julio de 2022
¿Recuerdan aquello
tan manido de la temporalidad cuando se habla de la calidad del trabajo en
España? Pues sepan que el mayor incumplidor es el propio Estado español. Concretamente, en la rama sanitaria
hay más de 67.000 profesionales con contrato temporal, lo que eleva al 40% la
eventualidad en la sanidad pública. ¿Se imaginan, por un momento, qué dirían
algunos si estos datos perteneciesen, por ejemplo, a una conocida multinacional
del textil?
El caso es que, para tratar de arreglarlo, el Gobierno acaba de materializar mediante Decreto una ley que ya se aprobó el año pasado, y que supondrá el fin de la precariedad laboral de estas personas, a la vez que tratará de sentar las bases para que no vuelva a ocurrir en el futuro. De entrada, no parece nada malo. Es lo justo, y además viene a aportar una mayor estabilidad a los profesionales que se encargan de nuestra salud.
Sin embargo, no todos lo ven igual. Sobre todo en la derecha, que tienen la fea costumbre de restar mérito a todo lo que no hacen ellos. Esta vez, le reprochan al Gobierno la tardanza en la aplicación de la medida pero, intencionadamente, olvidan que en el año 2016 gobernaban ellos y que, pudiendo haberlo arreglado, no hicieron nada. Por tanto, si ahora lo único que quieren ver es que el PSOE se anota un tanto que no le corresponde, en sus manos estuvo evitarlo y apuntárselo ellos.
En definitiva, más allá de las típicas e improductivas luchas partidistas, lo importante es tratar de resolver la eventualidad en el sector público porque, en sí misma, es contraria a lo que significa el servicio público, donde lo que debe primar es el funcionario quien, ajeno a los vaivenes políticos, tiene un puesto fijo precisamente para que la maquinaria del Estado funcione, gobierne quien gobierne, sin que se produzcan altibajos ni cambios en el servicio.
Cuidemos pues nuestro sector público, sobre todo el sanitario. Pongamos a su servicio los medios y los recursos necesarios. Paguémosles como se merecen porque ya han demostrado con creces su profesionalidad y su vocación. Exijámosles, pero démosles también lo que necesitan.
Pero, sobre todo, dejemos de hacer política con las cosas importantes, hagamos lo antes posible un gran pacto sanitario con los principales partidos para que no haya incertidumbre cada vez que hay un cambio de gobierno. Y después de esto, ya se pueden dedicar a hacer politiqueo con las cosas superfluas.
Publicado en PontevedraViva.com el día 15 de Julio de 2022
No hay comentarios:
Publicar un comentario