Pensamientos desde TAPEDELLO (111)

Tapedello, 16 Abril de 2017

El terrorismo no entiende de fronteras

El terrorismo yihadista golpea Europa. Países donde la palabra terrorismo no era de uso frecuente como Suecia, empiezan a tener que hacerlo para hablar de sus propios muertos. Europa se rasga las vestiduras en actos de solidaridad con los países atacados por el terror injusto y estéril. En España sabemos mucho de esto por desgracia, pero no he visto tanta solidaridad del resto de Europa cada vez que ETA asesinaba a nuestros compatriotas. Ni siquiera parecido al que se tenía con el IRA y los ingleses. Igual de injusto e inútil que el nuestro, pero con más reconocimiento y solidaridad 

Doble rasero

¿Por qué los sacerdotes facturan en B y nadie les mete mano? ¿Será porque la Iglesia goza de derechos diferentes? ¿Qué pasaría si Hacienda decidiese investigar el patrimonio de los curas españoles? Posiblemente habría una manifestación en su defensa porque a la gente no le importa que lo que los curas no pagan lo tengan que poner ellos.

Mas condenado

Más ha sido condenado por desobediencia pero se ha librado del delito de prevaricación y aunque va de hombre valiente por la vida, el hecho de verse libre de tal palo no lo ha podido disimular y ha respirado aliviado. Ahora lo que le queda, además de todos los recursos posibles, es tirar por el camino de en medio y culpar al estado español de todos sus males. Por lo de pronto, él ha entrado directamente en el terreno de los delincuentes, porque está ya condenado. Es un delincuente que tiene derecho a recurrir pero al que hay que tratar como tal. Incluso a reinsertarse.

Doble moral

Algunos analistas de la derecha española muestran sus vergüenzas hablando mal de un fallecido. Ha ocurrido con la reciente muerte de Carme Chacón, a la que seguro se le pueden criticar muchas acciones durante su corta vida. Seguro que ha hecho cosas con las que no estamos de acuerdo, pero ya ha habido tiempo de decírselo y de que se pudiera defender. Hacerlo ahora, además de injusto, es de una falta de moral y de principios formidable. Sobre todo si la crítica viene de gente que se parte el pecho en Semana Santa, que va a misa cada semana y que comulga con los principios de la Santa Madre Iglesia como el de la misericordia. Pensaba que eran los descarriados de la Iglesia Católica los que no tenían alma ni mostraban compasión alguna. Pero veo que no es así, y que incluso los católicos, apostólicos y romanos cometen los mismos errores.