Tapedello, 14 Febrero de 2016
Están hasta
las orejas
El contable de Noos ha declarado ante el juez que la
empresa de Urdangarin y su señora esposa, Cristina de Borbón, era una tapadera
para fraudes. Más claro no ha podido ser en su declaración. Sin embargo los
medios conservadores siguen defendiendo la inocencia de esta señora. No podemos
condenarla hasta que haya una sentencia firme, pero por lo que parece, están
hasta las orejas de porquería, tanto ella como su marido, el ex-duque.
Doble
protección
Rita Bárbara ha sido incrustada en la diputación
permanente del Senado para evitar posibles imputaciones por si a alguno de sus
secuaces valencianos se le ocurre abrir la boca y señalarla. Esto no es luchar
contra la corrupción ni ponerse al servicio de la justicia. ¿Pero esto no es lo
mismo que hizo el PSOE con Griñan y Chaves en Andalucía?
Maleducado
Pedro Sánchez le llamó indecente a Rajoy en el debate
electoral. Ahora sabemos que, además de indecente, Rajoy es un maleducado,
rencoroso y tiene actitud de niño mimado. Rajoy le negó el saludo a líder
socialista en un encuentro que ambos mantuvieron el pasado viernes. Aunque fue
el propio Sánchez quien se apresuró a disculparlo, asegurando que había sido
una especie de malentendido (no sé dónde está el malentendido cuando alguien te
alarga su mano para estrecharla con la tuya) estoy convencido de que fue un
acto sincero que le salió, al todavía presidente, del alma. Porque Rajoy es así,
además de indecente como presidente, es un prepotente que solo quiere gobernar
el. No soporta la idea de que otros puedan alcanzar acuerdos para gobernar. Y
eso le tiene en un estado de tal irascibilidad que le vuelve maleducado.
Rajoy no está a la altura de las circunstancias. No
aceptó la petición del Jefe del Estado de presentarse a la investidura. Ha dado
un paso al lado dejando esa responsabilidad a los que él llama perdedores de
las elecciones. Ni siquiera ha tenido la altura suficiente como para intentar
proponer un pacto de gobierno con nadie, se quedó únicamente en peticiones
vagas a través de los medios de comunicación. Tampoco dejará que otro forme un
gobierno porque amenaza con votar en contra de cualquier opción que no sea la
suya, ni tan siquiera se abstendrá para facilitar la gobernabilidad que él no
puede ofrecer. Recibe al todavía jefe de la oposición y no le da ni la mano. A
todo esto tiene el partido que preside imputado (investigado) por primera vez
en la historia de la democracia. En Valencia han tenido que formar una gestora
porque está todo podrido allí. ¿Qué quiere Rajoy?
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