Calvario

Pontevedra, 10 Febrero de 2016

Rajoy puede inhibirse y no presentar su candidatura para formar un Gobierno, lo cual le evitará pasar por el calvario de tener que escuchar desde la tribuna del Congreso palabras muy gruesas de casi todos los grupos políticos. Sí, puede pero eso significa evitar sus responsabilidades como candidato del partido más votado. El calvario de pasar por las dos votaciones y perderlas lo tendría que pasar Rajoy. A pesar de que sus incondicionales lo venden como una prueba de su integridad y patriotismo, lo cierto es que si realmente tuviera un sentido de la responsabilidad como se le supone, asumiría la que le corresponde de presentarse como presidente alternativo y en caso de que tal solicitud le sea negada, asumir con la cabeza alta tal decisión. Pero Rajoy, como es un ser humano normal, también antepone sus intereses personales a los del partido y a los del país. Con este paso a un lado Rajoy antepone sus intereses personales a los del país. ¿No es eso lo que le recriminan a Pedro Sánchez? ¿Con qué cara s presentaría a unas hipotéticas elecciones en caso de tener que repetirse? Con la misma con la que mintió a todos los españoles cuando dijo que asumiría las decisiones de las urnas.