Tapedello, 18 Septiembre de 2016
¿Curas
modernos?
La Iglesia como institución no va a cambiar por mucho que
algunos curas se vistan de modernos y confundan la fe con ser creyente, aunque
lleven pulseras de cuero y un fular al cuello. Ellos creen que representan una
tendencia moderada y aperturista, pero en el fondo son igualmente retrógrados y
antiguos. Estos días he podido asistir atónito a un espectáculo religioso en el
que uno de estos nuevos curas hacían su despliegue de prepotencia, chulería y
sectarismo. Se creen con derecho a decir todo lo que les viene en gana porque
juegan con la ignorancia de algunos y la educación de otros, que no se levantan
y lo ridiculizan en ese mismo momento.
Moderadores
moderados
Estoy seguro que en Galicia hay periodistas más y mejor
preparados para conducir un debate de las características del mantenido el
pasado lunes en la TVG. Periodistas ágiles, despiertos y con ese gen que tienen
los buenos periodistas que les lleva a indagar en aquello que sus entrevistados
no quieren profundizar. Los que moderaron el debate de la TVG son todo lo
contrario, apagados y sumisos al poder que les mantiene en su puesto. Así nos
va.
El enemigo en
casa
Leiceaga no llega a la gente. No es una persona que
genere cercanía ni tiene un mensaje que cale. Pero supongo que además de sus
limitaciones, lo peor que tiene que llevar es tener al enemigo en casa. Sus
colegas de partido y sus asesores, tanto los internos como los externos. ¿Quien
ha diseñado los carteles electorales de Leiceaga? Sin duda, algún enemigo.
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