Pontevedra, 30 Septiembre de 2016
Para definir la situación del PSOE el refranero español es muy vasto y
sabio. Desde el pasado mes de diciembre, los
socialistas van de batacazo en batacazo y no encuentran su suelo electoral.
Los problemas se le agolpan, tanto fuera como dentro del partido. Fuera porque
le están comiendo terreno y se los va a llevar la Marea. Y dentro, porque el
partido es una auténtica jaula de grillos donde todo el mundo quiere mandar.
El PSOE es presa de la
democracia interna que campa a sus anchas en el partido. Y esto, que en principio debe ser visto como algo bueno, en política no lo
es. En política la gente lo que quiere es ver un partido unido, con un único
mensaje que transmita solidez y confianza, todo lo contrario de lo que ahora es
el PSOE. Al contrario de lo que ocurre en el PP, donde el que se mueve no sale
en la foto, aquí es el que más se mueve el que más posibilidades tiene de salir
en la foto.
Muchos
son los factores de la pérdida de votos del PSdeG en Galicia, pero sin duda, el mayor problema lo tiene el partido en sí
mismo. No creen en su candidato, no hay cohexión, no están todos a una, es
más, hay gente dentro del partido que hace campaña en su contra. ¿Dónde iban
así? ¿De verdad creían que podían salir bien parados de esta situación? A decir
verdad, el resultado obtenido es mejor de lo que merecían.
A
pesar de disfrutar de una mayoría absoluta en Vigo, han sido arrasados por el PP en las últimas elecciones autonómicas.
¿Como es posible esto? Pues por la campaña en contra de su propio partido que
ha hecho Abel Caballero. Ni más ni menos.
El ególatra alcalde de Vigo, presume de vanidad, se cree más y mejor que
nadie y con la excusa de poner a Vigo
por delante de todo, es capaz de hundir a su propio partido. El mismo que
le tiene colocado como primero de los vigueses. Abel Caballero hizo campaña
contra su candidato y contra su propio partido. Llegó a decir “no es mi
candidato, ni es mi lista”.
Y ahora, cuando los resultados
no acompañan, le gusta hacer leña del árbol caído, un árbol que él mismo ayudó
a derribar pidiendo explicaciones a las direcciones del partido (a la gallega y
a la nacional).
¿Quién
es el responsable de los malos resultados del PSdeG? Hay responsabilidades por
acción y por omisión. ¿Es más
responsable Leiceaga por hacerlo mal o Caballero por no hacer nada? El
PSdeG es una jaula de grillos, un partido de partidos, de poderes divididos, de
egos personalistas, de dirigentes que no deberían serlo, de ex dirigentes que
no asumen que ya no lo son... Ante este panorama, tenemos que ser claros y
prepararnos para un futuro azul, el del PP.
Publicado en PontevedraViva.com el día 30 de Septiembre de 2016
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