Pontevedra, 06 Enero de 2016
Ciudadanos no da el nivel. Tiene un líder con cierto
carisma, que se defiende bien con la palabra, pero no tiene banquillo. Y una
persona sola no puede ser alternativa. En Galicia tenemos un ejemplo de lo que
es el partido en España. No hay equipo. Días antes de las elecciones generales,
se produjo el primer gran resbalón del partido en Galicia. Tras evitar acudir a
un debate en V-Televisión, el cabeza de lista por A Coruña, Antonio Rodríguez,
fue entrevistado en ese mismo canal y al ser cuestionado por sus propuestas
para nuestra comunidad, dijo que no tendría ninguna hasta después de los
comicios. Esto provocó que el partido naranja le blindase de las preguntas de
la prensa durante toda la campaña. Resultó curioso como un partido de la nueva
ola, que critica a la vieja política se ve haciendo lo mismo que el mismísimo Rajoy,
evitar las preguntas de los periodistas. ¿Cómo se entiende esto señor Rivera?
Recientemente, en plena polémica por la iniciativa
incluida en el programa de Ciudadanos para eliminar las cuestiones de género de
la ley contra la violencia de género, Rodríguez había convocado un paseo por el
mercado de Salgueiriños, en Santiago. Al evento sólo habían sido convocados
fotógrafos y cámaras, con el objetivo de que pudiera ser captada la imagen del
candidato repartiendo propaganda electoral y conversando con el vecindario,
pero sin posibilidad de preguntas. Al acto también acudieron, no obstante,
redactores a los que el servicio de comunicación del partido advirtió de que no
sería posible realizarle cuestión alguna a Rodríguez. De nuevo una actuación al
viejo estilo de la política rancia.
Nuevamente en un acto, pero esta vez en Ferrol, se
restringió únicamente a los medios gráficos. No obstante, después del paseo
Ciudadanos difundió un comunicado con supuestas ideas del candidato pero que no
se atreve a decirlas a los medios de comunicación. ¿Por qué no lo hizo? ¿Porque
no cree en ellas o porque no sabe explicarlas?
Señor Rivera, para ir todo el día dando clases de
democracia y de política para todos los ciudadanos, hay que predicar con el
ejemplo, condenar el franquismo de forma rotunda, votar a favor de cualquier
iniciativa que proponga aplicar la ley de memoria histórica, no confundir
violencia machista con violencia doméstica y, sobre todo, tener cantera.
Analice estos pequeños detalles y posiblemente encuentre algunas respuestas a
los malos resultados de las elecciones. Sí, malos porque los esperaba mucho
mejores.
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