Pontevedra, 01 Septiembre de 2017
El terrorismo no tiene razón de ser ni causa que lo justifique, y buscar explicaciones puede
resultar en vano. Más provecho obtendríamos si analizásemos porqué algunos
partidos políticos lo emplean como arma arrojadiza contra el adversario
tratando de utilizar a los muertos para su propio beneficio. Esta práctica, utilizada durante muchos
años por el PNV con el terrorismo de ETA, es copiada ahora por los independentistas
catalanes con el único objetivo de saciar sus ansias soberanistas.
La
mala relación entre el Gobierno y la Generalitat es sobradamente conocida. Cada día se agreden e ignoran
mutuamente. Son como dos divorciados que han tenido que verse en la boda de un
hijo. Al principio todo son poses y presuntas buenas palabras, pero a medida
que avanza la jornada y el cansancio hace mella, empiezan a tirarse los trastos
a la cabeza.
Esto es lo que ha ocurrido tras el
dantesco atentado en Barcelona, que han empezado a aflorar los problemas y lo
que inicialmente era cordialidad y colaboración, se ha convertido en ataques y
acusaciones. El Gobierno y las Fuerzas
de Seguridad del Estado acusan a la Generalitat de anteponer los intereses
secesionistas al interés común; y Puigdemont acusa a Rajoy de hacer política
con la seguridad recortando la plantilla de los Mossos y de esconder
información. Ambas acusaciones de ser ciertas, son graves, y requerirían de
explicaciones a la sociedad, aunque seguro que ambas partes exageran.
Lo que parece evidente es el interés de
los independentistas catalanes y de la propia Generalitat en utilizar el atentado
con fines partidistas. De no ser así, ¿por qué la presidenta del Parlamento de
Cataluña tiene que hacer distinciones entre policías? ¿Por qué el señor Consejero
de Interior tiene que diferenciar entre víctimas catalanas y españolas?
¿Por qué los señores de la Asamblea Nacional catalana tienen que pedir que las
condolencias se envíen no con la bandera española sino con la estelada catalana
que ni siquiera es la bandera oficial de Cataluña? ¿Por qué la Consejera de Gobernación,
tiene que decir que han respondido a la altura de cualquier estado? Está muy
claro, porque tienen un objetivo que es
la independencia, la declaración unilateral de la República Catalana, y ello
está por encima de todo, incluso de los muertos.
Pero no debemos alarmarnos, porque esto
no es más que lo que toda la vida se ha definido como recoger las nueces del árbol que mueven los terroristas, y ahora le ha
tocado a los catalanes.
Publicado en PontevedraViva.com el día 01 de Septiembre de 2017
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